Los zapatos fueron creados como la mayoría de la población puede imaginar: de la necesidad de proteger los pies de las piedras, de la suciedad y también de la posibilidad inminente de pisar un animal muerto o mullido. Las pinturas de mano en cuevas de España y Francia indican que los zapatos fueron adheridos en 10.000 a.C. en la era paleolítico. Desde entonces, los individuos prehistóricos han mostrado sus pies protegidos y se han unido con lo que tenían en ese momento: especies rudimentarias de calzado hechas de paja y madera, probablemente el primer modelo de historia de los zapatos. Entre los elementos hechos de piedra, había varios para raspar las pieles, lo que indica que el arte de hacer cuero también es muy viejo. En Mesopotamia, una región donde Iraq está ahora, era un zapato de cuero crudo común, y los problemas representaban una alta posición social. En el antiguo Egipto, el calzado estaba hecho de paja, papiro o fibra de palma y utilizado por la población sólo cuando era necesario. Los faraones utilizaron sandalias adornadas con oro, beneficiados sólo de los nobles de la época. Varias partes del globo conforman el zapato como lo es hoy: fue en Grecia que lanzaron los primeros zapatos para cada pie, siendo uno para la derecha y el otro para la izquierda, pero es de la cultura musulmana que origina el concepto de zapato que conocemos hoy. Con la introducción de la cultura árabe a mediados de Europa, el uso de diferentes materiales, la colocación de cuero, las costuras trabajadas y el diseño preciso dio lugar a diferentes e innovadores tipos de zapato, utilizados por hombres y mujeres. Los zapatos de tacón alto ya eran de lujo masculino: en el siglo XVI Francia, los talones eran características de zapatos masculinos, simbolizando la ostentación y la riqueza ? esto ocurrió porque el rey Luiz XV tenía una altura baja y ordenó zapatos de tacón alto. La estandarización de la numeración de los zapatos es de la cuna inglesa y mérito del rey Eduardo I, que uniformó las medidas. La primera referencia en la fabricación de calzado es también de Inglaterra, cuando, en 1642, se proporcionaron cuatro mil pares de zapatos y 600 pares de botas para el ejército, ocasionando en una demanda sustancial de botas y zapatos.
Fuente: Historia de todo.